Nuestra Amadísima Maestra Suprema Ching Hai habló amorosamente con el equipo de Supreme Master Television el 9 de diciembre, 2020, dejando a un lado el preciado tiempo de Su intenso retiro de meditación por el mundo. Ella gentilmente tradujo del aulacense, también conocido como vietnamita, al inglés, historias del libro: “Un tesoro del folklore judío” compilado por Nguyễn Ước. Una historia titulada: “El guardián de la ciudad,” trataba sobre Abraham, un venerado Patriarca del judaísmo y el cristianismo y un venerado profeta en el islam.
“Ahora Abraham a menudo reflexionaba y hablaba consigo mismo, diciendo así: ‘¿Cuánto tiempo debemos de enfocarnos en el trabajo laboral? Realmente no vale la pena cuando tenemos que obedecer al cuerpo por cualquier otra cosa excepto la tierra. Porque la tierra produce vegetales y frutos, por tanto nos mantiene con vida, nos sustenta. Pero tenemos que ver que la tierra también necesita la lluvia. Si no hay lluvia entonces…’ Él decía: ‘Si el cielo no se abre para permitir que la lluvia baje a la tierra, entonces la tierra tampoco puede producir nada.’ Así que Abraham cambió de parecer. Estaba pensando que todo lo demás pertenece a lo físico, nada es mejor que la tierra, porque la tierra produce tantos productos nutritivos que nos mantienen con vida. Pero entonces pensó de nuevo: ‘No, pero la tierra necesita la lluvia.’” (Sí.) Así que él piensa que la tierra no es la número uno tampoco.
“Entonces él está pensando: ‘Oh no, entonces solo el cielo es digno para que lo adoremos.’ Porque antes él pensaba: ‘Oh, todo solo para cuidar del cuerpo no es digno. Trabajar, trabajar solo para ganar algo para comer, o para sobrevivir, eso no es digno. Entonces la tierra es mejor. Deberíamos concentrarnos en adorar a la tierra, no adorar el cuerpo, ni cuidar demasiado del cuerpo.’ Y entonces después él estaba pensando, ‘Oh, pero la tierra necesita la lluvia.’ Así que ahora piensa: ‘Si el cielo no permite que caiga la lluvia, entonces la tierra es inútil.’ Por eso, ahora piensa que el cielo es más digno de ser venerado. Sí. (Sí).
Y luego estaba mirando al Sol en el cielo. Él pensaba: ‘Oh no, el Sol da a todo el mundo resplandor y color brillante de forma que todos los árboles y frutas y todo puede crecer’. (Sí). Y entonces él dijo: ‘Bueno entonces, sólo el Sol es digno de que lo adoremos’. (Sí). Y entonces el Sol se puso. Él pensó: ‘¿Eh? Bueno. Entonces, el Sol no es el Dios, no es el Espíritu Elevado’”, eso es lo que él quiere decir. Así que el Sol tampoco es lo bastante digno para adorarlo.
“Y después de eso, Abraham pensó, el lo está ponderando, y vio salir la Luna, y luego muchas estrellas hermosas y brillantes en el cielo, y cómo iluminaban la noche oscura. Entonces él dijo: ‘Oh, la Luna y las estrellas, sólo ellas son dignas de que las adoremos’”.
“Entonces la Luna desapareció. Lo hace a veces en la noche. “Y entonces él dijo: ‘Oh, entonces la Luna tampoco es lo bastante digna de nuestra adoración como Dios, como Espíritu de Dios’”. Lo llaman Espíritu de Dios, pero quieren decir Dios Todopoderoso. (Sí) “Y entonces Abraham siguió mirando, siguió pensando, siguió ponderando…”
La Maestra también mencionó la importancia de aprender sobre el pueblo judío.
El pueblo judío, en mi impresión, son una raza muy incomprendida de seres en el mundo. Así que quizás deberíamos aprender algunas cosas sobre ellos, para que tengamos más armonía entre todo el mundo y el pueblo judío. (Sí, Maestra).
Nuestra Más Compasiva Maestra, nuestra profunda gratitud por compartir Su valioso tiempo y por abrirnos los ojos a la belleza de diferentes religiones, tradiciones y pueblos. La Divinidad nos ha otorgado muchísimas bendiciones a todos. Estamos deseando poder vivir en armonía unos con otros y con todos los queridos seres en un planeta vegano. Que los Poderosos Dioseas protejan siempre a la Maestra para que viva en paz, alegría y excelente salud mientras Su noble misión llega a ser cumplida, en la Gloria del Cielo.
Para la retransmisión completa de esta conferencia con la Maestra Suprema Ching Hai, acompáñennos en Entre Maestra y discípulos en una fecha posterior.