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Tuve un sueño en el que vi a la Maestra horneando pasteles en una gran carpa donde había una mesa larga con muchos pasteles encima. La Maestra estaba parada en una esquina de la tienda sosteniendo una manga pastelera. A Su lado, los iniciados esperaban en fila para recibir sus pasteles. Avancé en línea con entusiasmo, pero de alguna manera el recipiente en mis manos no era adecuado para sostener los pasteles. Era un objeto extraño que no pude identificar en mi sueño; por lo tanto, comencé a entrar en pánico mientras me acercaba a la Maestra, y al mismo tiempo esperaba poder obtener un pedazo de pastel. Al ver mi extraño recipiente, la Maestra no mostró ningún signo de sorpresa, pero siguió sonriendo mientras Ella limpiaba cuidadosamente mi recipiente y lo decoraba poco a poco con flores hechas con el glaseado vegano, como si cuidara con delicadeza y atención a un bebé, acomodándose al contenedor muy diferente que traje. En el sueño, sentí que una parte de mí no aceptada por la sociedad fue luego aceptada. Una suave y cálida corriente fluyó hasta lo más profundo de mi corazón, haciéndome sentir tan feliz y cálida… Después de que conseguí el pastel, quise guardarlo para luego saborearlo; sin embargo, el pastel de repente se transformó como si estuviera vivo. Estaba tan asombrada que me lo tragué todo apresuradamente e instantáneamente me desperté de mi sueño. Después de despertarme, me sentí muy renovada. Solía tener pesadillas con frecuencia y no me resultaba fácil relajarme y dormir bien. Sin embargo, el sueño fue tan gozoso, apacible y dulce que al despertar sentí una ligereza incomparable y mucha dicha en mi corazón. Parece que en mi sueño la Maestra acomodó mis defectos y disolvió mi frustración por no ser aceptada en la vida real, permitiendo que mi corazón perturbado descanse en paz y se sienta animado. Y el pastel transformador me recordó que todo en este mundo es pasajero y no manejar todo con la mente. Solo siguiendo la guía del Maestro interior y adaptándome a la situación mientras actúo en consecuencia, puedo dejar ir los apegos y alcanzar la tranquilidad y la felicidad. Gracias, Maestra, por concederme un sueño tan placentero. Espero que los compañeros iniciados que escuchen mi historia también puedan disfrutar de la paz y la tranquilidad del Cielo. Que la Maestra goce de buena salud y todos Tus deseos se cumplan. Que el equipo de Supreme Master TV se bañe en la Dicha Celestial. Hsing-Ying de Taiwán (Formosa) Afortunada Hsing-Ying, Gracias por compartir tu maravillosa visión interior con nosotros. El gran Amor de la Maestra es el bálsamo que nuestros corazones necesitan para sanar y aceptarnos realmente a nosotros mismos, sin importar nuestras carencias y experiencias en este mundo. La Maestra ve más allá de las apariencias y usa todos los medios para bendecirnos y despertarnos a nuestro Verdadero Ser. Nos alegra que hayas tenido un sueño tan sanador para ayudarte en tu viaje espiritual. Que tú y tus entusiastas conciudadanos taiwaneses conozcan la paz siempre. En benevolencia celestial, Equipo de Supreme Master TV P.D. La Maestra tiene este amoroso mensaje para animarte: “Sincera Hsing-Ying, Estoy tan conmovida por tu inocencia y el mensaje en tu hermosa visión interior. Muchas personas no experimentan el mundo como un lugar de amor y aceptación, y por eso tenemos mucho sufrimiento, dolor y dudas. La Maestra viene a honrarnos con la experiencia del Amor verdadero, para que podamos sanar y transformar nuestro dolor en una conciencia iluminada. De hecho no hay nada en este mundo que no sea transitorio y que traiga verdadera felicidad. Me alegra que hayas recibido el significado de tu visión y que haya sanado tu corazón y tu mente de alguna manera. Recuerda meditar diariamente y adicional cada vez que puedas. Antes de dormir, siéntate también en meditación en la cama, para que cuando duermas, estarás en un modo meditativo. Eso te ayudará a tener mejores visiones, en vez de pesadillas. El Poder Maestro usa nuestros sueños para enseñarnos, así como en otros momentos del día cuando estamos abiertos. Que la Luz de los Budas brille para siempre sobre ti y el humilde pueblo taiwanés (formoseño)”.